Las personas que tartamudean lo hacen como consecuencia de una hiperactividad en el hemisferio derecho del cerebro, y una falta de actividad en el sistema auditivo del hemisferio izquierdo. Estos defectos dificultan la producción del lenguaje, y hacen que una persona padezca este problema. Dicho de otra forma, para poder hablar correctamente se necesita que los dos hemisferios cerebrales trabajen de manera conjunta y organizada para poder articular los sonidos de la voz de una manera correcta. Al no suceder esto, se presenta
el tartamudeo que puede definirse como un trastorno que afecta a los sistemas neuronales que se utilizan para hablar.
Sin embargo, es bastante curioso encontrar que aquellas personas que padecen de tartamudez, pero que establecen un programa de ejercicios para hablar correctamente son capaces de superar su defecto cuando leen en voz alta o cantan al unísono con otras personas, lo que a decir verdad es alentador ya que efectivamente existe una metodología que puede aplicarse para combatir el tartamudeo. Y esto solo significa algo y es que el cerebro puede reacomodarse de tal manera que utilice otras áreas normalmente no destinadas para el habla y supla de esta manera las fallas que puedan presentarse en aquellas zonas que por lo general utilizamos todas las personas para hablar.
Como es bien sabido, el cerebro no es algo estático e inmutable, sino que tiene en cambio una gran capacidad de adaptación de tal forma que puede acondicionar o reacomodar sus partes (por decirlo de alguna manera) para lograr subsanar sus propias deficiencias, aunque vale la pena aclarar que este poceso solo se da una vez el cerebro es re entrenado para desarrollar correctamente las labores que le son asignadas. En cierta forma es como cuando en una empresa existe un operario que no desarrolla de manera eficiente su labor. Una vez su jefe se da cuenta de ello, puede cambiarlo por otra persona con más capacidades y de esa manera todo vuelve a tomar su curso normal y, qué sucede entonces con el operario que no trabajaba bien?, muy simple, puede asignarse a otro tipo de tareas para las que esté más capacitado. De la misma forma funciona nuestro cerebro.
La tartamudez es un trastorno de la fonación o de la articulación de sonidos que comienza de forma característica en la infancia. Se caracteriza por vacilaciones, repeticiones y prolongación de los sonidos y las sílabas y provoca una intensa ansiedad en la persona que se ve incapaz de hablar de forma eficiente. De igual forma es un transtorno que puede desaparecer sin razón alguna en la edad adulta o que puede - por el contrario - agravarse con los años y más aún cuando el paciente no recibe ninún tipo de atención.
Afortundamente cada día hay más avances en la cura de esta enfermedad y las terapias existentes solucionan el problema de la tartamudez en quienes deciden hacer lo que es necesario para erradicar ese padecimiento de sus vidas.